¿QUÉ ES?
Es causada por la bacteria Neisseria gonorrhoeae y la puede propagar cualquier tipo de actividad sexual. Se puede contraer por contacto con la boca, la garganta, los ojos, la uretra, la vagina, el pene o el ano.
SINTOMAS
Más del 50% de las personas con vagina y del 10% de personas con pene no presentan síntomas. La infección en el recto y la garganta usualmente no produce sintomatología alguna. Cuando aparece, en general, se manifiesta a los 2-7 días tras la relación sexual. Los síntomas pueden incluir:
En el caso de personas con vagina, podemos encontrar los siguientes síntomas:
- Cambios en el color, olor o cantidad de secreciones vaginales.
- Reglas más cuantiosas o sangrado entre periodos.
- Sensación de ardor al orinar.
- Dolor en la zona baja del abdomen.
- Dolor durante las relaciones sexuales en las personas con vagina mujeres (dispareunia)
En el caso de las personas con pene, se pueden apreciar:
- Sensación de ardor al orinar.
- Irritación o dolor alrededor de la uretra.
- Secreción del pene.
- Molestias al eyacular.
- Puede haber molestias en los testículos.
TRANSMISIÓN
La gonorrea se transmite principalmente a través del contacto sexual vaginal, anal u oral con una persona infectada. También puede transmitirse durante el parto, lo que puede causar infecciones oculares severas en el recién nacido. La bacteria infecta las membranas mucosas del tracto reproductivo, así como otras áreas como el recto, la garganta y los ojos.
DIAGNÓSTICO Y TRATAMIENTO
La gonorrea se cura completamente curable y se diagnostica a través de examen de orina o mediante un cultivo de una muestra de la zona afectada. Si no se trata, puede extenderse a la próstata y testículos y causar, entre otras cuestiones, como esterilidad y afección del corazón, articulaciones o, incluso, el sistema nervioso.
Es esencial realizar pruebas regulares para detectar la infección, especialmente en personas con múltiples parejas sexuales o aquellas que tienen relaciones sexuales sin protección.
La terapia con antibióticos se prolonga durante unos siete días entre los que se recomienda evitar una reinfección aun cuando se está bajo los efectos de los antibióticos.
PREVENCIÓN
Tanto la realización de una felación, como recibirla sin un método de barrera puede implicar un alto riesgo de infección aun cuando no haya eyaculación en la boca. Además, el empleo de métodos barrera (condón o cuadrantes de látex) en la penetración y/o sexo oral evita la infección.



